Decenas de países miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) concluyeron años de negociaciones para alcanzar un acuerdo “pionero” destinado a impulsar el comercio electrónico.
La protección de los consumidores en línea, la digitalización de los procedimientos aduaneros y el reconocimiento de la firma electrónica figuran entre las medidas previstas en el texto para fomentar y facilitar las transacciones digitales.
El comercio electrónico está creciendo mucho más rápido que el tradicional.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) calcula que en 2020 los intercambios electrónicos representaban ya una cuarta parte del comercio mundial, con un valor de casi 5 billones de dólares.
A pesar de su creciente importancia, no existe un conjunto de normas mundiales comunes para el sector por lo que una vez en vigor, el acuerdo hará que el comercio sea más rápido, más barato, más justo y más seguro.
Las negociaciones se iniciaron en 2019, y los países negociadores representan el 90% de los miembros de la OMC, entre los que se encuentran grandes potencias como Estados Unidos, la Unión Europea y China.
El texto final de la negociación se presentará el viernes en una reunión a puerta cerrada en la sede de la OMC en Ginebra, pero el proceso para que el acuerdo sea firmado y entre en vigor podría durar varios años.
Australia, Japón y Singapur, que lideraron las negociaciones, afirmaron que el objetivo es facilitar las transacciones electrónicas, promover el comercio electrónico y fomentar una economía digital abierta y de confianza.
El acuerdo también pretende ayudar a las personas a utilizar la tecnología de forma segura protegiéndolas del fraude, al tiempo que se impulsa el crecimiento económico a través de la digitalización del comercio.
El acuerdo también prevé disposiciones específicas para proporcionar un trato preferencial a los países en desarrollo. Además de poner fin a la burocracia aduanera, una de las disposiciones clave del texto es la introducción de una nueva moratoria de los derechos de aduana sobre las transacciones electrónicas.
FUENTE: Swissinfo